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Imagen de Ilona_Ilyés en Pixabay.

El estiércol es el excremento de los animales de granja, y funciona como el principal abono orgánico sólido que existe en el mercado.

Este producto es el resultado del proceso digestivo natural de los alimentos que los animales de la granja ingieren en su día a día.

A mayores, hay que sumarle en el resultado final, el material de mezcla para su procesado. Tradicionalmente, el lecho vegetal que sirve de cama o que se emplea para la limpieza de los animales.

Puede ser usado tras un proceso de fermentación, o puede convertirse en la aportación principal de futuras mezclas de compostaje o de humus de lombriz, siendo el producto que aporta la mayor cantidad de nitrógeno.

¿Qué es el estiércol comercializado como abono?

El estiércol comercializado como abono orgánico es el producto final que resulta del procesado del estiércol natural o excrementos de los animales de granja, sumado a los acolchados vegetales que sirven a los animales de lecho o cama.

¿Qué tipo de estiércol es el más utilizado?

El estiércol más utilizado es el producido por los animales de granja tradicionales. Los preferidos son: el de bovinos, caballos, ovejas, gallinas y conejos.

También podemos citar el uso del purín dentro de las explotaciones agrícolas. En este caso, sería un abono orgánico de aplicación líquida que no está acondicionado para jardinería, huertos urbanos o pequeñas huertas domésticas y familiares, debido a su mal olor.


Estiércol de caballo

Abono orgánico 100% natural y ecológico, que se puede emplear como enmienda orgánica en el abonado de fondo de nuestras huertas.

Las sustancias nutritivas que aporta de forma natural este abono orgánico va a beneficiar a todas las plantas de tu jardín, mejorando sus floraciones y su perfume natural.

En el cultivo de frutales y de hortalizas de fruto, mejora la floración y el cuajado y engorde de las frutas.


¿Cuál es el mejor estiércol?

El mejor tipo de estiércol depende de la calidad de nutrientes que puede aportar a nuestras plantas y a nuestros cultivos.

Existen diferentes factores que van a influir en la calidad de los nutrientes de este abono orgánico, tanto por su composición, como por su contenido. En este sentido, podemos destacar:

  • La especie del animal y su procesado de la alimentación, o el grado de descomposición del estiércol.
  • La cama o el lecho en el que se depositan, ya que irá mezclado en el mismo proceso de compostaje.
  • La manipulación y el proceso de compostaje del estiércol antes de ser incorporado a los terrenos.

Así, por ejemplo, el estiércol de granja más rico en Nitrógeno es el estiércol de gallina, también conocido como gallinaza, que llega a alcanzar el doble de Nitrógeno que el de vacuno.


Estiércol de oveja

Abono orgánico 100% natural y ecológico, que se puede emplear como enmienda orgánica en el abonado de fondo de nuestras huertas.

La aportación de macronutrientes está dirigida a mejorar la fructificación y aumentar las defensas naturales de los cultivos y las plantas en general, ya que es muy rico en Potasio y Fósforo.

Se puede emplear en cualquier cultivo de nuestras huertas domésticas, frutales y viñedos.


Beneficios del uso del estiércol

Los beneficios de usar estiércol como abono orgánico de fondo, es decir, antes de la plantación de los cultivos, es muy grande y de considerable importancia, no solamente para incrementar la calidad del terreno de plantación, si no para acompañar a nuestras plantas en su primera fase de crecimiento.

El estiércol realiza unas funciones propias de los abonos orgánicos: mejorar las propiedades biológicas, físicas y químicas de los terrenos en los que se incorpora.

Sus mayores beneficios se consiguen con una aplicación tras ser fermentados. También es importante tener suelos con humedades acondicionadas para la asimilación de este abono orgánico.


Compost orgánico

El compost orgánico es el resultado de procesar el estiércol de granja con el compostaje tradicional de materia vegetal, para poder utilizar en nuestros huertos urbanos o cultivos en macetas y pequeños contenedores.

Se puede incorporar directamente al sustrato de plantación, para mejorar la mezcla y beneficiar a los cultivos.


Trucos para usar el estiércol

Recuerda unos sencillos trucos para usar el estiércol en tu jardín o en tu pequeña huerta doméstica.

¿Cómo utilizar el estiércol?

Plantas en Galicia te aconseja que nunca uses el estiércol de granja en fresco, ya que corres el riesgo de quemar las raíces de todos tus cultivos.

El estiércol se usa de forma tradicional como abonado de fondo de nuestras huertas y terrenos de plantación:

  • Es el primer producto que incorporamos a la tierra en nuestras tareas programadas del Invierno, para ayudar a regenerar los nutrientes en el suelo y que estén a disposición de las plantas desde un primer momento.
  • La incorporación del estiércol en la tierra se realiza mediante el trabajo del arado o la motoazada, ya que nos interesa ganar en profundidad y que la mezcla sea esponjosa.
  • Este trabajo forma parte del laboreo tradicional de la tierra y es una de nuestras mayores recomendaciones.

El abono orgánico formado a partir del estiércol de granja también puede ser utilizado, con posterioridad, a lo largo de la Primavera y el Otoño, pero debes tener siempre presente estas precauciones:

  • Recuerda que todas las clases de estiércol de este apartado son más beneficiosos después de un proceso de fermentación, y que no deben usarse ni frescos, ni en su forma pura (sin mezclar).
  • Siempre puedes hacer una mezcla en un contenedor o recipiente acondicionado, de modo que obtengas un compost joven, que puedas incorporar al suelo sin riesgos.
  • La incorporación será superficial: extendemos el abono orgánico como si de un mantillo se tratara, y lo trabajamos con un rastrillo o una azada, logrando una mezcla fina.

Abono orgánico con estiércol peletizado

El abono orgánico formado por la fermentación de estiércol de granja también puede presentarse en forma de pellets, para una aportación a voleo sobre el suelo de cultivo.

Podemos dejar sobre la superficie o mezclar ligeramente con un rastrillo, de forma que no se entierre en el suelo más de quince centímetros. 

Una vez esparcido sobre nuestro jardín, debemos regar abundantemente para su disolución. Así lograremos una mezcla más homogénea.